Brexit for dummies.

Las redes sociales son sin duda un generador de diversas opiniones, pero son tantas que incluso estas se salen fuera de contexto, no todos los temas han sido hechos para todos, pero igual quieren subirse al famoso "tren del mame" sin saber que rumbo están llevando, pasamos de los temas deportivos a los políticos, de los políticos a los de espectáculos, y así sucesivamente, esta vez, el transporte de las opiniones nos lleva al Reino Unido donde se está llevando a cabo el Brexit, en cuanto corrió la noticia muchos quisieron verse expertos en el tema de la economía global, pero sucede que es algo más que una votación, es un antes y un después y es algo que tiene consecuencias, no se trata solamente de ver la noticia de los resultados del referendum, sino de darle seguimiento y tomar las precauciones necesarias en materia de economía.

Primero que nada ¿Qué es el Brexit?
La nueva palabra de la economía global es la abreviación Brexit, que viene de Great BREtain y EXIT, Gran Bretaña y salida en inglés, respectivamente; este es un referendum en el que se somete a votación popular para determinar si el Reino Unido conformado por Inglaterra, Escocia, Gales, Irlanda del Norte y Gibraltar se quede en la Unión Europea, instituida en 1993 por el tratado que lleva su mismo nombre, este consiste no solo en una moneda unitaria (el euro), sino en una política, turimos sin visas o permisos y comercio exterior libre de fronteras pero con gobiernos completamente autónomos; actualmente es conformada por 28 países, 5 estados candidatos y 2 potenciales.

Todo suena bien ¿Por qué no seguir en la Unión Europea?
El conflicto Europa-Reino Unido no es nada nuevo, desde la década de los 70 ya tenía ciertas tensiones cuando se unieron a la Comunidad Económica Europea (Antecesora a la Unión Europea), incluso hubo un referendum a su permanencia en 1975 pero decidieron quedarse, pero nuevamente surge el debate, pues grupos conservadores alegan que la globalización del mercado y la economía al lograr tratados como esos se corre un riesgo enorme de perder oportunidades laborales que serán ocupados por extranjeros tanto de Europa como de otros países con pasaporte comunitario; la crisis económica en Grecia, la migratoria en Medio Oriente, las cuotas para ser miembro de la UE y el terrorismo latente en el continente han hecho que varios de estos grupos se opongan a este tipo de modelo económico que debería de ser autónomo y no de las peticiones de varios estados; por otra parte los que están los que quieren mantenerse en el selecto grupo pues están conscientes de que la globalización de la economía es primordial en estos tiempos y que las consecuencias de dejar la UE serían bastante graves, depreciación de la libra esterlina, caída de las bolsas más importantes a nivel mundial, demasiados trámites burocráticos para importación y exportación, además de afectar el turismo, migración y la estabilidad de los negocios que manejan euros (e incluso dólares).

Confiados del referendum.
Tras el resultado del referendum (51.9% a favor del Brexit por 48.1% en contra según la BBC) salieron a la luz muchos detalles, uno de ellos es que la gente no supo a que iban a votar, según The Washington Post las búsqueda de Google en la Gran Bretaña tenían un común denominador, la gente se preguntaba que pasaba si dejaban la UE, uno puede pensar que esta búsqueda se hizo conscientemente antes de voto, pero no, se hizo horas después de haberlo emitido, y es que tanto David Cameron como los partidos en contra del Brexit se confiaron en que su resultado sería favorable, el Brexit no fue divulgado como debió haber sido, no solo la comunidad británica estaba poco enterada de que pasaría si se salían o no de la UE sino la comunidad internacional; prácticamente no hubo promoción; además de que la mayoría de los que votó a favor del Brexit fueron los adultos mayores de 65 años, el voto de los más viejos se fue reduciendo en contra del referendum conforma la edad disminuia; hay que tomar en cuenta que las personas de la tercera edad representan el 16.6% según el último censo del 2011, que es donde encontramos a los grupos más conservadores.

Los primeros efectos.
Inmediatamente después de darse la victoria del Brexit el primer efecto colateral del mismo fue la depreciación de la libra esterlina cayendo en un 12%, niveles que no se veían desde 1985, esto por supuesto genera alzas en las divisas como el euro, el dólar americano y para mala fortuna de nosotros, el peso mexicano (y todas las monedas latinas), por supuesto las bolsas de valores de varios países cayeron dando como resultado una especie de Viernes Negro, en Europa algunas de las destacadas fueron Madrid con una baja del 12.35%, Frankfurt 9.18%,  Milán 12.48% Lisboa 8.73%, París 7.72%, Atenas 15.17%, Tokio 8%, Hong Kong y Sidney 3%, Seúl 2%, Shanghai 0.9%, México 2.73% y el Nasdaq 4.12%; muchas de ellas con bajas históricas que representan también el desplome de los principales índices petroleros, siendo el más afectado el de Estados Unidos, quienes tampoco veían venir la salida del Reino Unido de la UE.

Consecuencias a mediano y largo plazo.
La más importante hasta el momento es la renuncia de David Cameron como Primer Ministro que se concretará en octubre, pues ha puesto en duda su credibilidad en cuanto a como se llevó a cabo el referendum para evitar la salida de la Zona Euro; la prensa dice que su sucesor sería Boris Johnson, ex alcalde de Londres también del Partido Conservador y pro-Brexit quien ya tiene un plan para no ver tan afectados los intereses tanto de la Unión como del Reino; ya que considera que seguirán siendo parte de Europa y considerándose europeos a pesar de ya no pertenecer al selecto grupo promoviendo el discurso "I cannot stress too much that Britain is part of Europe and always will be"; es decir, no se dejará manejar por discursos populistas y extremo convervadores pues se protegerán a los migrantes, lo cual se espera pueda cumplir en un lugar donde la moneda podría depreciarse hasta un 20%, lo cual afectaría a diversos negocios que dependen de la globalización, tal es el caso de la Premier League, quien esta temporada al ser ya planeada en derechos de transmisión, patrocinio y transferencia de jugadores no afectaría y todo sería normal, pero habría que ver lo que pasará de cara a la temporada 2017-18 y el impacto que lleve el trámite de separación.



Desunión del Reino.
Otras de las consecuencias que tampoco midieron los que votaron a favor de Brexit es que este puede ser el antecedente de una posible desintegración del Reino como lo conocemos en la actualidad, sobretodo después de varios años de conflictos como el de Irlanda del Norte e Irlanda, en el caso de los norirlandeses podrían llevar a cabo un referendum de independencia, el cual también lo había llevado a cabo Escocia hace unos años pero finalmente decidieron quedarse en la Gran Bretaña pues estuvieron conscientes de las consecuencias de perder los privilegios y derechos de pertenecer a la UE, pero ahora con el Brexit podría retomarse; Gales también podría tomar un acto independista sobretodo por el aspecto del idioma que sienten que ha perdido su cultura original por el inglés que ha predominado los últimos años, ya ni se diga del tema religioso y de una posibilidad de estabilidad en la UE, dejando prácticamente a Inglaterra solo, y con las consecuencias económicas aún más adversas que las del Viernes Negro, depreciación, devaluación, bajas en la Bolsa de Londres y un mercado de importación y exportación trabado.

¿Qué nos debe preocupar entonces?
Además de las alzas de las divisas como el dólar, el euro y la libra esterlina, también el posible discurso populista en contra de las políticas de migración y mercado de libre comercio, además de los intercambios culturales, educación y laboral, la transición económica no es algo que se hace de la noche a la mañana, pues mientras se hacen los trámites necesarios para que se cumpla el plazo de salida se tienen que tomar bastantes medidas precautorias, tal y como lo ha hecho Japón quien está dispuesto a suministrar liquidez de cara a las consecuencias del Brexit, por lo pronto estar pendientes y que no nos agarre de sorpresa algún trámite, algún viaje, negocio o estudios, tal y como pasó con los votantes.