American Idiot es para viejitos.
El título de esta columna hace alusión a la frase que unos muchachos de 18 años aproximadamente le dijeron a un amigo (que vale la pena mencionar que está a punto de cumplir 25 años), fue entonces cuando nuestro grupo de amigos que oscila en una edad entre 23 y 30 años cayó en cuenta que estamos más cerca del 2030 que del 2004 cuando salió dicho álbum histórico de la banda Green Day y sin embargo nos negamos a ese contexto de antigüedad, comparado a otras generaciones que han aceptado que sus bandas o solistas favoritos han pasado a la posteridad.
La calidad.
Para los que estuvimos en secundaria o preparatoria a mediados de la década pasada nos tocó una época interesante para el rock y el pop, los materiales musicales tienen una masterización de ambos géneros ya es más definida gracias a la digitalización del sonido que permite una mejor calidad instrumental, es decir, captar mejor cada elemento usado en una canción, sin escuchar los sonidos rasposos o de aire que solían acostumbrarse en décadas anteriores; esto al mismo tiempo permitió la famosa remasterización de canciones clásicas, sobretodo del rock; el hecho de que la masterización digital y con alta definición sea algo tan común en nuestros días nos hace acostumbrarnos a que todas las canciones seguirán siendo iguales que olvidamos la percepción de que ya han pasado 10 años de cierta canción.
Nos ha dejado de interesar la música nueva.
Según un estudio del sitio AV CLUB, especializado en cultura pop general, con el paso del tiempo algunas personas dejan de estar interesadas en la denominada "música de moda", ellos suponen que la edad es a los 33 años, basado en las preferencias de Spotify como lo son los playlist que hace tanto la plataforma como los usuarios, si tomamos en cuenta el rango de edad de quienes estuvieron en secundaria o preparatoria a mediados de la década pasada las razones son varias, sobretodo en la actualidad, una de ellas podría ser que muchos deciden solamente escuchar solo la música y los géneros que conocen o acostumbran sin explorar canciones o bandas nuevas, el streaming ofrece esa comodidad y no sucede como en épocas anteriores donde encontrarse con música nueva era algo tan común gracias a que los canales de televisión como MTV o vh1 y también la radio ponen más la música nueva que la de hace 10 años por así decirlo, es decir, los servicios actuales no te hacen tener a la fuerza lo más reciente.
Estabas en onda, pero luego cambiaron la onda y ahora la onda que traes ya no es onda...— pictoline (@pictoline) June 2, 2017
¿A qué edad dejamos de escuchar música "de onda"? pic.twitter.com/39VYOcW8tp
Es probable que todas las generaciones no sientan tanto el paso de los años, pero sí, desde el 2007 fue hace ya una década, tiempo en el que algunas bandas vivían su apogeo como Green Day, Thirty Seconds to Mars, The Used, AFI, Simple Plan, My Chemical Romance, The Rasmus, Blink 182, Linkin Park, Fall Out Boy, Panic! At the Disco, entre muchas otras; el hecho de haberse quedado en una zona de comfort en el gusto musical ya sea por la descarga o el servicio de streaming ha evitado darnos cuenta del paso del tiempo; hay que recordar también que muchos de los proyectos musicales de aquella época ya no existen o han cambiado para adaptarse, aunque no todos con gran éxito o del conocimiento popular por lo que probablemente desconozcamos que Thirty Seconds to Mars ya va por su tercer álbum después del éxito de A Beautiful Lie del 2005, o que Green Day el año pasado sacó Revolution Radio ya más de una década de American Idiot, del glorioso regreso de Blink-182 en 2016 y que Panic! At the Disco ha tenido tantas rotaciones que ya hasta nos sorprendemos de quienes son los integrantes actuales; lo cierto es que olvidamos su misma existencia por quedarnos con su más grande momento.
Como cualquier cambio generacional encontramos que todas ya no sienten la música como antes, que los materiales de las bandas que aún siguen en formación han cambiado demasiado o se han "vendido"; llamenlo nostalgia, adaptabilidad de los nuevos tiempos o falta de apertura a las nuevas propuestas, lo cierto es que los años ya pasaron, pero de una forma acústicamente exclusiva para nosotros.
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