La superidad moral del Rock.
Es uno de los géneros musicales que mayor evolución ha tenido desde su creación a mediados del siglo XX, sus variantes han creado los ritmos más icónicos de la historia, la lírica es digna incluso de ser parte de la interpretación de la literatura moderna, su musicalización es influencia no solo para las futuras generaciones sino incluso para otras producciones y por supuesto historias para diversos medios pues sus más grandes representantes se convierten en leyendas y es aquí donde sus fanáticos les rinden pleitesía en sus diferentes variantes, el rock con todos sus subgéneros ha formado un culto, uno que ante los que lo oyen y ven los hace sentir superiores moralmente pues representa la inteligencia y la rebeldía sobre sus diversos enemigos que son las clases conservadoras y la música comercial, es decir el pop y su más reciente nemesis, el reggaeton.
Y es que muchos rockeros consideran su género como exclusivo de la gente inteligente pues sus letras, música, videoclips, historia de su elaboración y composición y hasta traducción es bastante compleja, cosa que no pasa con el pop que es más sintético y con una letra que solamente cumple con ser pegajosa o el reggaeton que tiene un ritmo más repetitivo pero bailable y que tiene una lírica considerada misógina (que el rock también ha sido mencionado así en algunos momentos), sin educación o respeto a ciertos sectores (que sí podría considerarse) y hasta vulgar; lo cual también incita al clasismo, es decir, escuchar reggaeton es exclusivo para "gente pobre" pues al tratarse de un género considerado callejero y aparte latino es común que esto haga que la mayoría piense que es la gente de los estratos sociales urbanos más marginados quienes lo prefieran y por supuesto estos sitios son propensos a que sean denominados como poco intelectuales, sin embargo no hay estudios científicos contundentes que realmente comprueben la afectación intelectual o el status socioeconómico de cada uno de los géneros musicales.
Si bien el rock es un género más amplio, donde su elaboración es más compleja y las letras tienen más profundidad tiene una similitud con el reggaeton, ambos son medios completamente comerciales, son como marcas, y como el libre mercado en el que vivimos hay gente que prefiere un producto a otro, aquí va un claro ejemplo, el rock podría ser ese producto artesanal elaborado minuciosamente donde sus creadores se toman su tiempo para que su creación tome forma convirtiéndola en un objeto de culto por el mismo detalle que su línea es diferente en casi diferente en cada presentación pero con un estilo representativo mientras que el pop y el reggaeton son más artificiales en muchos casos, producidos en masa, con nueva imagen pero con mismo formato de elaboración y aún así se vende porque cumple su cometido de consumo sin importarle a sus productoras si quienes lo consuman son pobres o ricos.
Y es que es ese uno de los más grandes detalles que ignoran los rockeros, el escuchar un género no se hace ni más ni menos en cualquier aspecto porque incluso los artistas involucrados en el rock de lo que menos hablaban era precisamente de atacar o sentirse superiores a otros géneros, si bien en algunas canciones y entrevistas se nota el repudio hacia la música artificial esto no formó parte de su grandeza, sino su trabajo reconocido a nivel mundial; el problema recae en sus fanáticos quienes al sentirse como iluminados del mensaje de sus ídolos sienten que cualquier ritmo repetitivo, con letra pegajosa y creado de manera artificial no es digno de ellos y que pueden ser juzgados por ellos ya sea mediante burlas o comentarios clasistas, aún cuando muchos de estos son incluso superiores a ellos en estudios, estatus socioeconómico e incluso en un puesto laboral.
Factores como la nostalgia por una supuesta decadencia de los ritmos ha sido una de las constantes aún cuando el legado ha pasado o evolucionado en otros géneros o que estos ya no tienen tanta cobertura mediática y publicitaria como el mismo reggaeton la tiene en estos momentos, cuando en su momento varias bandas y solistas del rock abarrotaban los principales escenarios y hoy piensan que varios de los actuales se conforman con estar en festivales de música junto con otras agrupaciones que no tienen que ver del todo como el electro, el pop y el hip hop, además de que muchos se oponen a los sistemas actuales de streaming pues consideran a los formatos físicos como auténticas piezas y no tan vacíos como sitios como YouTube Red, Spotify o Apple Music donde supuestamente argumentan que estos no generan tantas ganancias para los artistas y de ahí que ya no existan buenos proyectos musicales como antes cuando ignoran que a lo largo de la historia todos los formatos han sido criticados, incluso cuando surgió el tornamesa y los discos de vinilo muchos suponían que sería el fin de la música pues esta solo se escuchaba en vivo y ya nadie iría a ver a los artistas tocar, cuando sucedió todo lo contrario, en cada formato los músicos llenan cada vez más los aforos de los diferentes eventos; es más una queja nostálgica que el quererse adaptar y respetar los cambios generacionales.
Comentarios
Publicar un comentario