Eco en la Legión de los Idiotas.


Nuevamente la muerte vuelve a hacer polémica en este año 2016 pues ahora resuena el nombre del escritor italiano Umberto Eco, otra que por supuesto me toma por sorpresa y no tanto por el acontecimiento sino por como se tomó el momento para que su muerte se convirtiera en un vivo recuerdo en las mentes que nos atrevimos a leerlo y seguirlo, y digo atrevimiento pues pocos han digerido su lectura, no solo por su compleja filosofía crítica y semiótica, sobretodo tratándose de los tiempos modernos, mismos que Eco ha criticado, sobretodo a las famosas redes sociales de internet, pues aseguró que nos han vuelto una "Legión de Idiotas" pues estas les dan el derecho de hablar a cualquiera (incluyendo a este medio).

Si bien las redes sociales se han vuelto un medio bastante bueno para comunicarnos con otras personas en cualquier parte del mundo también ha rebasado varias líneas delgadas en cualquiera de los sentidos, uno de ellos el de la opinión "Las redes sociales le dan el derecho de hablar a legiones de idiotas que primero hablaban sólo en el bar después de un vaso de vino, sin dañar a la comunidad. Ellos rápidamente eran silenciados, pero ahora tienen el mismo derecho a hablar que un premio Nobel. Es la invasión de los imbéciles"; y es que la opinión que antes se corría como lo menciona Eco en lugares cerrados sin que tuvieran alguna trascendencia o se quedaran plasmados en algún objeto tangible en este caso una computadora, un smartphone o una tablet; la opinión hablada o escrita se ha vuelto al alcance de todos, independientemente de sus estudios, argumentos, fuentes o sobre como consiguieron dicha información para dar sus opiniones que constantemente se vuelven equívocas.

Dice un viejo dicho de las señoras mayores "Solo hablan porque tienen hocico" y el internet no está exento de tal refrán, cualquiera que tenga ya la habilidad de comunicarse en este medio ya tiene las facultades de ser aquel idiota que menciona Eco, pero para evitar generalizaciones no hay que irnos muy lejos, basta con irnos a las páginas de noticias en las cajas de comentarios sobretodo en países bajo índice de educación y ver la sarta de comentarios sin sentido, con una ortografía pésima, insultos por doquier, peleas ficticias captadas ante la burla de los espectadores invisibles detrás de la pantalla; pero no solo está una caja de comentarios, un estado en Facebook, un tuit o incluso un blog, también recordemos que internet nos ha dado toda una gama de productos para saber que está diciendo la gente, los podcasts, los video blogs y recientemente Periscope.

Es entonces cuando el idiota se convierte en idiotizante, pero como en cualquier red social necesitas de seguidores, un grupo de gente que te apoye o te destruya, que crea en ti o te tache de mentiroso y es cuando adquiere su termino que ya conocemos en el Internet, aunque no es exclusivo de este medio "Si la televisión había promovido al tonto del pueblo, ante el cual el espectador se sentía superior (...) el drama de Internet es que ha promovido al tonto del pueblo como el portador de la verdad"; es curioso como esta declaración toma mucha fuerza con varios ejemplos, les explicaré uno sencillo, el fin de semana pasado una amiga y yo decidimos visitar la sección de libros de una tienda departamental, por supuesto encontramos títulos bastante interesantes, pero llamó mucho nuestra atención uno de los estantes de dicho departamento, libros de los famosos Youtubers con sus propios libros, uno puede pensar que se han convertido en algo multifacético y que su talento no es solamente hablar frente a una cámara en un canal del famoso portal, se equivocan totalmente, se trata de la famosa 'Literatura basura'; ver solamente la portada nos provocaba una risa burlesca y sobre como se desperdicia el papel en dichas publicaciones, pero es material consumible y por supuesto que existe mercado, aunque casi siempre se trataba de cosas que pueden leer pre adolescentes o gente inmadura, lectura fácil, con 'dibujitos' y 'fotitos', títulos llamativos, la foto del autor, en fin una sátira de la lectura actual que haría retorcer a todos los Premio Nobel de Literatura (y de otras categorías incluso).

Eco también se había pronunciado en contra de la televisión y su contenido basura, pero si la famosa 'pantalla chica' ya había expandido la voz de los idiotas, internet vino a darle un avance sin precedentes y esto lo reconoció el italiano "No es solo reconocer los riesgos evidentes, sino también decidir cómo acostumbrar y educar a los jóvenes a usarlo de una manera crítica"; los riesgos del internet los hemos visto todos los días en diversas formas en las que incluso la realidad supera la ficción, la educación contemporánea no ha enseñado del todo estos riesgos, mucho menos las familias pues la brecha generacional no coincide con la actualidad infantil, juvenil y la de los adultos, cada vez surgen nuevas redes sociales o aplicaciones y por consiguiente otro tipo de riesgos, hacen falta mejores programas que el famoso "no hablarle a desconocidos en el chat".

Pero Umberto Eco incluso el mismo exhortó a los medios a ser más confiables ya que "nadie es capaz de entender hoy en día si un sitio es de confianza o no"; apenas los sitios de los periódicos más importantes de cada región o país, revistas con mucho tiempo de circulación, noticiarios basados en cadenas noticiosas, reportajes hechos por ellos mismos e incluso los de las instituciones, escuelas o universidad; hoy en día es más fácil que alguien le crea más a un enlace en preview de Facebook que a un periódico impreso, es cuando los experimentos sociales hechos en este tipo de situaciones tienen tanto éxito, de ahí surgen las parodias como el Deforma, los links de broma o el mismo sensacionalismo/amarillismo.

Así como puede tener la razón puede estar equivocado como cualquier ser humano y tanto la televisión como el internet no tienen del todo un lado idiotizante o está lleno de los mismos, tienen sus lados ventajosos, el problema es que el mercado no abarca las suficientes personas para obtener popularidad, y es que el internet es tan libre que uno decide si seguir a los idiotas o ser un idiota, una línea delgada que hay que atravesar. Umberto Eco podrá haber sido uno de los filósofos más influyentes del siglo XX pero quizás no ha estado del todo adaptado al mundo actual que se está manejando mucho por el internet, algunos que tuvieron la oportunidad de leerlo aseguran que se quedó atrapado en los noventas, que su labor terminó entrado el nuevo milenio, claro si tomamos en cuenta que murió a los 84 años y que su edad sencillamente ya no era tan adaptable a los medios sociales de la actualidad puede que exista un poco de exageración en sus declaraciones pero a la vez hay algo cierto y sus razones habrá tenido para desconfiar de un medio tan poderoso en nuestros días.

De cualquier manera y como siempre hay gente que tomó demasiado en serio las palabras de Umberto Eco y otros que lo consideramos como una explicación de la actualidad social, si usted se sintió ardido por las declaraciones del italiano, ya es un idiota; si fue lo contrario, bienvenido al Internet, yo seré su guía.

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