La deuda del fútbol con los LGBT
Hemos visto como el fútbol se ha expandido de sobremanera alrededor del mundo, en un inicio la intención de la FIFA era expander la práctica y el juego a otros continentes, recordemos que los inicios de este deporte se dieron en Europa y América Latina, por lo que luego se empezó a ver como se hacia popular en África, Asia, Oceanía y la América Anglosajona, al grado de que se ha vuelto un tema inclusivo en razas, religiones e incluso afiliaciones políticas, después veríamos como las mujeres buscaron un espacio propio y hoy las competencias femeninas son algo tan común y a la vez popular que poco a poco se ha creado la necesidad de consumo en este sentido, pero hay un secto que no ha podido incluirse en el llamado "Deporte más bello del mundo", los gays.
Hablar de fútbol con este sector social es hacerlo recordar los tiempos amargos de las clases de educación física donde su más grande temor era convivir en ambientes "rudos" o donde tenían que convivir con heterosexuales y hacer "actividades de machos", el bullying, los escasos dotes en etse deporte y la nula identificación con el deporte los hace sentir no solamente relegados sino rechazados y es quizás uno de los aspectos negativos que jamás ha percibido la FIFA, las distintas confederaciones, federaciones y clubes e incluso podríamos también a los medios de comunicación especializados de que no existan espacios de inclusión y concientización.
Algunos dirán que la FIFA y las confederaciones ya se ha encargado de hacer campañas contra la discriminación, además de multar a quienes se les sorprenda en actos o cánticos homofóbicos, pero desgraciadamente esto es completamente insuficiente, las campañas son completamente ignoradas y la homofobia abunda en las canchas y estadios sobretodo en países con porcentajes elevados, además de que la FIFA en afán de sus negocios multimillonarios ha otorgado sus máximos eventos y autoridades a países con estricta fama homofóbica, el Mundial de Rusia y Qatar es el gran ejemplo, que tienen estrictas leyes al respecto de la homosexualidad el organismo rector del fútbol decidió aún así darles las sedes en pro de sus negocios y los poderosos patrocinios que conllevaban.
Otro ejemplo de que no se está aplicando la inclusión correctamente es la Premier League que el año pasado inició su campaña Rainbow Laces, del 30 de noviembre al 5 de diciembre los equipos apoyarían a los LGBT mediante imagenes relacionadas al famoso arco iris en sus fotos de perfil en redes sociales, los capitanes usarían el lazo con los colores además de hacer un llamado a los aficionados de reportar actitudes homofóbicas en los distintos terrenos; todo esto sonaría bien pero la recepción fue completamente negativa, sobretodo en internet donde varios equipos recibieron comentarios como "Dios creó a Adán y Eva no Adán y Lukaku" o "Di no a los LGBT"; la mayoría proveniente de fanáticos religiosos o musulmanes radicados ya fuera en el Reino Unido o de otros países, incluso todo esto se dio en equipos de elite como Arsenal, Chelsea, Manchester United, entre otros; aunque tanto las autoridades de la liga como de los clubes comentaron que tomarían cartas en el asunto lo cierto es que quedó bastante mal la intención; no obstante los especialistas ya sea en fútbol o en derechos humanos en Inglaterra aseguran que la campaña debe seguir y ser más estricta con sus políticas además de mayor compromiso de los clubes, sobretodo aquellos que tienen gran número de aficionados a nivel global.
Pero no todo está perdido, pues hay clubes quienes sí han decidido tomar acciones claras contra la discriminación y la homofobia, aprovechando la negligencia de sus federaciones o de sus propios directivos incluso, el ejemplo más claro es el St. Pauli que actualmente se encuentra en la 2. Bundesliga algunos sectores de sus fanáticos ondean banderas de arco iris junto a los punks y radicales de izquierda quienes haciendo este un ambiente amigable y tolerante; el Celtic de Glasgow en Escocia también es un club que a pesar de su estructura e ideología católica es común ver banderas de apoyo LGBT con mensajes como "Un club abierto a todos" además de que se les permite a sus aficionados gays expresarse en los distintos foros libres de intolerancia; en Estados Unidos el Portland Timbers ha hecho diversos mosaicos en las principales cabeceras de su estadio el Providence Park además de mensajes donde favorecen a los LGBT; son pocos los casos, pero así es como se puede empezar con otros clubes sobretodo en Europa y Estados Unidos donde la extrema derecha ha contagiado mucho al fútbol, es cuestión de que los demás sigan y no se basen en campañas prácticamente obligadas.
Pero es una situación complicada al no haber identificación por parte de los dos bandos, es decir, no hay jugadores que hayan salido del clóset y que se conviertan en ídolos y tampoco hay personas LGBT inmiscuidas en el fútbol ya sea en el área directiva o incluso en los medios de comunicación especializados en deportes; y aunque se hayan creado ligas o equipos de fútbol amateur gay esta no es la solución hacia la inclusión pues si bien están practicando el deporte se están alejando de los verdaderos escenarios, y es que bien como dice la famosa frase "Si no puedes con el enemigo únete a él"; hace falta que los LGBT se quieran abrir campo dentro del fútbol ya sea dentro o fuera de las canchas, y por supuesto existen quienes son fanáticos pero es necesario involucrarse más ¿Es enfrentarse a un escenario homofóbico? También lo fueron las calles hace algunos años ¿Hay mucha intolerancia en el deporte? Por supuesto y por eso tiene que haber pioneros en la materia ya sea como jugadores profesionales, comunicadores, directivos y hasta entrenadores, personas LGBT que impongan el respeto suficiente en la materia como se ha hecho en la música, las artes e incluso la política, mientras que en el fútbol en específico su futuro brillante podría estar todavía en el clóset.
Pero es una situación complicada al no haber identificación por parte de los dos bandos, es decir, no hay jugadores que hayan salido del clóset y que se conviertan en ídolos y tampoco hay personas LGBT inmiscuidas en el fútbol ya sea en el área directiva o incluso en los medios de comunicación especializados en deportes; y aunque se hayan creado ligas o equipos de fútbol amateur gay esta no es la solución hacia la inclusión pues si bien están practicando el deporte se están alejando de los verdaderos escenarios, y es que bien como dice la famosa frase "Si no puedes con el enemigo únete a él"; hace falta que los LGBT se quieran abrir campo dentro del fútbol ya sea dentro o fuera de las canchas, y por supuesto existen quienes son fanáticos pero es necesario involucrarse más ¿Es enfrentarse a un escenario homofóbico? También lo fueron las calles hace algunos años ¿Hay mucha intolerancia en el deporte? Por supuesto y por eso tiene que haber pioneros en la materia ya sea como jugadores profesionales, comunicadores, directivos y hasta entrenadores, personas LGBT que impongan el respeto suficiente en la materia como se ha hecho en la música, las artes e incluso la política, mientras que en el fútbol en específico su futuro brillante podría estar todavía en el clóset.
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