¿Alguien quiere pensar en PEMEX?
A través de las redes sociales nuevamente vuelven a darse los mensajes y cadenas que promueven una especie de "boicot" hacia el gobierno por el aumento a la gasolina que llega hasta ser de un 20%, fallando nuevamente la famosa Reforma Energética y la promesa del adiós a los 'gasolinazos' por parte del Presidente Enrique Peña Nieto; esto por supuesto desata "la ira de escritorio" y la "revolución pacífica"; el chairismo, el sensacionalismo y la paranoia vuelven a ver el problema superficial, en ver al verdadero enfermo que en este caso es Petróleos Mexicanos a.k.a PEMEX.
Problemas de (tener) una paraestatal.
Las prácticas monopólicas alrededor del mundo y más en esta época de enorme consumo, promoción y competencia tarde que temprano terminan por entrar en estados de crisis, si bien PEMEX en sus inicios se consagró como la empresa más grande de América Latina, pero entrando esta década el gigante empezó a tambalear, las razones son diversas, corrupción tanto dentro como en los sindicatos, gasolineras, proveedores y relacionados, falta de inversión a sus instalaciones, mantenimiento y seguridad de las mismas que a su vez se traduce en reformas que no han podido solventar las verdaderas necesidades de la petrolera, el derroche de sus más altos funcionarios e involucrados, la falta de competencia y atracción de inversión, malas costumbres de importación y exportación del crudo y refinado, la poca o nula atención a la deuda que genera y ahora sí la negligencia del gobierno en atender las verdaderas problemáticas institucionales.
El petróleo no es eterno.
La intención de Lázaro Cárdenas de expropiar el petróleo fue ni más ni menos que un aprovechamiento de la debilidad de las economías europeas y estadounidense por el conflicto de la Segunda Guerra Mundial, ante el apogeo de la industria petrolera y con ideales un tanto socialistas, Cárdenas aprovecha para nacionalizar cualquier aspecto relacionado, maquinaria, refinerias, bases, edificios, transportes, gasolineras, etc.; el petróleo tenía que ser de todos, subsidiado, con oportunidades de trabajo y que los ingresos fueran para la realización de obras públicas de manera responsable; sin embargo la corrupción, contratos inflados y la falta de decisiones adaptadas a los tiempos en el sector energético están condenando a PEMEX.
¿Y sobre el consumidor?
Para términos más fáciles de explicar Gabriel Darío Ramírez Sierra, Maestro en Economía por el Centro de Investigación y Docencia Económica dice lo siguiente: "Es cierto que la gasolina esta subsidiada y que son los deciles de ingresos medios y altos los más beneficiados (si usted o su familia cuenta con un auto ya es de ingreso medio o alto, imagínese los que no). Pero si el costo de hacer llegar un subsidio indirecto a una gran masa de la población pobre a cambio de un subsidio indirecto a una muy pequeña masa de población rica, me parece que se justifica. ¿Porqué para otras cosas no critican que para que la población pobre sea beneficiada la clase acomodada reciba un efecto mayor? Ejemplos de esos hay varios. El problema de esto es que las fuentes de trabajo y de producción del país están en manos nada más y nada menos que de ese grupo de ingresos medios y altos, también son los que empujan el consumo, los que importan, los que exportan, los que compran la deuda doméstica, los que innovan. Nos estamos convirtiendo en un país donde al pobre lo subsidias y al rico te lo ch*ngas, ni más. Las políticas pasan por alto al trabajador independiente, a la PYME y a la clase media que es la que detona el crecimiento y lucha contra la desigualdad del país. No estoy en contra de la liberalización del precio de la gasolina. Pero las condiciones de mercado no van a permitir precios competitivos, van a estar en el margen cercano a la colusión. Nadie exige cuentas al gobierno de a dónde va a parar todo ese "ahorro", nadie castiga los excesos de gasto de la clase política.
Preferible que ese subsidio, mal aplicado y como sea, al menos terminará entre la población".
¿Autogol en el monopolio?
Mientras la clase política y empresarial alega que la Reforma Energética no es más que una ilusión contradictoria otros aprovechan las ventajas que otorga, tal es el caso de OXXO, Texaco, Lodemo Red, Gulf, Eco,Rendichicas, COSTCO e Hidrosina, quienes se dicen en varios medios a partir del 2017 ofrecerán gasolineras con marca propia y no por medio de una franquicia de PEMEX; además de que la exploración y explotamiento de los yacimientos petroleros se harán a través de Petróleos ciertamente pero con contrastistas particulares cosa que ya hace la italiana Eni; con esto la Comisión Reguladora de Energía (CRE) realiza la liberalición de los precios de la gasolina, es decir, el famoso aumento por región; sin embargo se dice que "no hay escasez de combustible"; por supuesto que esto se debe a las famosas tomas clandestinas, aunque también a los daños que han sufrido sus instalaciones a lo largo de los años por diversas causas aunado a la poca venta del petróleo mexicano en el extranjero; la caída del gigante petrolero le ha significado comenzar con prácticas que le provocarían un enorme dolor de estómago del coraje a Lázaro Cárdenas.
¿Es necesario el boicot?
Nuevamente el chairismo y el falso patriotismo hace de las suyas en las redes sociales, no hay alguna explicación lógica de como puede afectar este boicot al gobierno, recordemos que vivimos en una sociedad de consumo que se mueve todos los días y la interrupción del mismo afecta a todos (en caso de que tuviera éxito el dichoso boicot); hay gente que se traslada a su trabajo o que dependen del transporte público o privado y estos necesitan combustible, dejar su trabajo y por tanto el sustento de los suyos por un movimiento de redes sociales es completamente absurdo. La sociedad mexicana lejos de cumplir su cometido queda en ridículo cuando la verdadera solución debería ser preguntarnos ¿Qué podemos hacer por PEMEX y por nuestros métodos y hábitos de transporte?
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