Las mentiras millonarias.
Desde que el ruco Roman Abramovich adquirió el Chelsea en el verano de 2003 la tendencia del siglo XXI ha sido que multimillonarios o accionistas adquieran la mayor o la totalidad de varios equipos, aunque la tendencia es más hacia los chicos, por considerarlos una inversión a futuro, una vez comprados algunos despilfarran el dinero en contrataciones, instalaciones, imagen y mercadotecnia con la intención de generar títulos a corto plazo, otros inversionistas solo adquieren clubes con la intención de mejorar sus resultados atrayendo futuros mercados y ser simplemente redituables, esto por supuesto ilusiona a los aficionados quienes viven bajo el pensamiento de que el dinero compra títulos, tal como pasó con los ' Blues ', los dueños a veces te lo venden y sus aires de grandeza se dan por doquier, cuando por supuesto no la tienen, para muestra los ejemplos. Manchester City. Antes de 2008 los ' Citizens ' sufrieron diversas crisis económicas y deportivas viviendo a