Donald Trump Bowl.
La National Football League (a.k.a NFL) es uno de los espectáculos que genera más rating y ventas de publicidad tanto local como internacional y se ha visto inmersa ahora en la polémica racial que invade a Estados Unidos, se ha comentado en este su humilde blog como este país ha atravesado por esta cuestión, hoy en día la situación tiene un nuevo capítulo en su siempre tensa historia donde se ha metido el Presidente Donald Trump, pero no para bien, sino para seguirle poniendo más limón a la herida.
La NFL maneja muchísimo dinero y tiene varios intereses que por supuesto requieren resultados para conquistar campeonatos y por consiguiente que su producto como equipo deportivo y espectáculo; para poder llegar al tan ansiado Super Bowl necesitas de los jugadores mejor capacitados tanto en lo físico como lo mental; la apertura racial (por las razones que ustedes gusten) de muchos equipos con el paso del tiempo ha ayudado a que muchas de sus figuras sean negros, ejemplos actuales: Cam Newton (Carolina Panthers), Dak Prescott (Dallas Cowboys), Russell Wilson (Seattle Seahawks), LeGarrette Blount (New England Patriots), Odell Beckham Jr. (New York Giants), entre muchos otros, pero sin duda la figura que más destaca es la de Colin Kaepernick.
El ahora ex-jugador de los San Francisco 49ers sobresalió no tanto por sus habilidades dentro del emparrillado sino por haberse arrodillado durante al ceremonia del himno nacional como protesta por la represión policiaca a ciudadanos de raza negra el año pasado; este tipo de manifestaciones significarían un precedente de los que se veía venir con la entrada del gobierno de Donald Trump; recordemos que este es su primer temporada de la NFL bajo su mandato; el tan llamativo racismo y discurso de supremacía blanca por parte del Presidente ha hecho eco en toda la nación, hemos visto como ha sido el despertar de muchos Neo-Confederados que ya han hecho sus manifestaciones en lugares de Estados Unidos, además de diversos videos que circulan en redes sociales de expresiones racistas por partes de autoridad y ciudadanos hacia las diversas minorías.
Uno podría pensar que los deportistas ni deben, ni quieren, ni pueden meterse en asuntos políticos, que el hecho de que se encuentren en una zona privilegiada como lo es ser un jugador de la NFL los pone en una posición totalmente ajena, que no les importa o no les incumbe, sin embargo por primera vez vemos la sensibilidad que tienen hacia las causas civiles, y es que las declaraciones de Trump lejos de solucionar el problema racial en Estados Unidos lo sigue incrementando, prueba de ello es lo que dijo al respecto y cito: "Wouldn’t you love to see one of these NFL owners, when somebody disrespects our flag, to say, ‘Get that son of a bitch off the field right now. Out! He’s fired. He’s fired!’", esto último haciendo alusión a su famosa frase cuando era estrella de reality show.
Algunos de los dueños de los equipos de la NFL han sido reconocidos por ser republicanos y Trump pensó que tendría su respaldo no solo en esta declaración sino en toda su presidencia al ser los máximos responsables de uno de los espectáculos más vistos en la Unión Americana, no fue así, personajes con ideología republicana como Jerry Jones (CEO de los Dallas Cowboys), Stan Kroenke (CEO de Los Angeles Rams) y hasta Tom Brady (QB de los New England Patriots) han retirado su apoyo a Trump y han decidido apoyar a los jugadores, otros dueños han decidido mantener un perfil bajo pero dejando que sus jugadores se manifiesten; la protesta se ha hecho tan grande dentro y fuera de la cancha que si los dueños mantienen una posición de despedirlos o sancionarlos saben que pueden perder más, sobretodo con muchos hombre en posiciones clave, algunos dueños (y su staff) de la NFL sabe también que puede ganar más con esto ¿Cómo? Muy fácil, dejar que sus jugadores sigan su posición con respecto al himno genera morbo y rating, además de que muchas personas independientemente de su raza han acudido a los estadios para apoyar a sus también ídolos, lleno seguro; además de catapultar a sus estrellas en caso de que estos lleguen más lejos durante la competición; mucho mejor que correrlos por una falta que asegura el mismísimo dueño de los Cowboys "no es ofensiva".
El escándalo no termina ahí, mucha gente tanto dentro como fuera de la NFL ha criticado la intervención de Trump por medio de sus delcaraciones cuando debería estar enfocado en otros temas prioritarios en su agenda como el caso de los territorios estadounidenses afectados por los recientes huracanes, la tensión con Corea del Norte, el reciente tiroteo en Las Vegas y la eterna lucha contra el terrorismo; pero el pueblo norteamericano ha olvidado que Trump quiere ser el protagonista y ganador del reality show La Presidencia de los Estados Unidos.
Lea más en: De la Enmienda XIII y México
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