Candidatos enfermos de Poder.

Está claro que lo candidatos actuales a la Presidencia de la República (y uno que otro cargo público) no están a la altura de lo que debe ser un proceso democrático, sobretodo en tiempos donde la población está harta de como sus antecesores han llevado las riendas del país y las instituciones; pero es más el hartazgo actual porque no hay propuestas concretas, las campañas han brillado no por sus planes sino por su guerra sucia, una estrategia que se ha desgastado desde el 2006 y que se ha transformado en ataques a través de las redes sociales ya sea a través de ellos o por sus simpatizantes, tanto la propaganda como las declaraciones no tienen pies ni cabeza para representar a México ante su pueblo y ante el mundo y la pregunta es ¿Realmente qué quieren ellos? ¿Gobernar o inflar sus ya elevados egos?

En el caso de José Antonio Meade, candidato de la alianza Todos por México (PRI-PVEM-PANAL) ciertamente está alguien con experiencia en cargos públicos, su padre Dionisio Meade también fue servidor público, por lo que conoce de toda su vida lo que es trabajar para el gobierno, justo como el menciona en su spot "Yo lo he hecho los últimos 20 años", sin embargo el principal problema de Meade es precisamente el PRI, la gente está harta de este partido por todas las atrocidades y crímenes evidentes cometidos por varios de sus integrantes en puestos importantes, su enriquecimiento a costa de la integridad del ciudadano es ahora reflejado en hartazgo que se vive en varios sectores de la sociedad, el partido ha arrastrado a 'Pepe' al lodo y esto pudo haber sucedido con sus compañeros de gabinete que también sonaban para ser candidatos del 'Tricolor'; sin embargo siguen renuentes a ser la mayoría en todas las cámaras y estados ¿Por qué? Darle continuidad a proyectos que beneficien las arcas del partido y sus máximos integrantes, sean legales o ilegales, mantener lo que se ha denominado como la 'Dictadura Perfecta'; una no basada en mantener una figura en el poder pero sí en una transición y en una ideología que se adapte a sus intereses personales, una en la cual pueden incrementar sus fortunas y las de sus empresas, sindicatos e inversiones, además de seguir ejerciendo su poder sobre la gente con bajo nivel educativo manipulándolos a través de los distintos medios que favorecen o disfrazan su imagen; se habla mucho internamente de un PRI renovado que más bien es la simulación real del fenómeno del 'Nuevo Rico' uno que al conocer el poder del dinero se corrompe; el partido ha cambiado por supuesto pero se aleja muchísimo de la base institucional de sus fundadores.

Pasamos ahora al segundo y tercer partido más popular que unen fuerzas para crear Por México al Frente, liderada por Ricardo Anaya (que como dato extra es el candidato más joven con 39 años) quien tiene al PAN, al PRD y a Movimiento Ciudadano, una alianza criticada por pertenecer a ideologías políticas radicales, mientras los azules pertenecen a la derecha conservadora que siempre los ha distinguido, los amarillos y naranjas están del otro lado en la izquierda, cosa que los ha distinguido desde sus respectivas fundaciones, una unión que hasta no hace muchos años hubiera sido imposible, ¿Por qué lo hacen ahora? El PAN por sí solo al igual que el PRI ha perdido mucha credibilidad, en tanto que el PRD al perder a López Obrador le ha bajado el número de miembros y votantes, muchos alegan que en sí no hay alianza sino conveniencia para evitar perder votos, y en parte tienen razón, los integrantes también tienen empresas e intereses personales además de su enorme vínculo con los altos mandos de la iglesia católica (en el caso del 'Blanquiazul'), misma que por muchos años se ha querido beneficiar de la política mexicana por la misma razón que el sector privado, por supuesto esto es lo que busca Anaya, una persona que por ratos sube en las encuestas pero que su paranoia, inexperiencia y abuso de poder dentro de sus filas lo hace bajar inmediatamente; quiere estar por encima de todos pero termina muy por debajo de los demás.

El más interesante es sin duda Andrés Manuel López Obrador con la coalición Junto Haremos Historia conformada por MORENA, PES y PT; es el más popular en las encuestas, es su tercera elección presidencial consecutiva y es prácticamente el Mesías de varias personas que no solo creen, defienden su discurso a muerte; podría decirse que lo tiene todo, poder, dinero, creyentes y hasta su propio partido, lo único que le falta es la Presidencia; aún así también le llueven detractores quienes aseguran que podría dejar al país como Venezuela, que cuando fue Jefe de Gobierno del Distrito Federal dejó endeudada a la ciudad además de no haber mejorado la calidad de vida de sus habitantes y recalcarle su pasado priísta argumentando que vive de los partidos; las opiniones son divididas pero lo cierto es que AMLO tiene afán y ansías de protagonismo y de hacer historia, de transformar por completo un sistema que el considera se ha corrompido y que piensa cambiarlo, aún que esos supuestos cambios supongan un enorme riesgo para los intereses económicos, políticos y sociales de muchos que se oponen a su victoria y hacen lo posible por evitarla, lo que el denomina 'La Mafia del Poder'; cosa que al tabasqueño no le importa pues como incluso lo han dicho sus colaboradores, es necio y terco.

Por último tenemos a Margarita Zavala, la única candidata independiente que pudo conseguir las firmas necesarias para hacer posible su contienda a la presidencia, como es bien sabido, la también (y para algunos mal) llamada 'La Esposa de Calderón' al no poder contender por su partido el PAN (Precisamente por las influencias de Anaya en Acción Nacional) decide irse por la vía sin partido, donde la acompañarían también Jaime Rodríguez 'El Bronco', Armando Ríos Pitter y María de Jesús Patricio Martínez; la pregunta es ¿Qué hizo Margarita que no hicieron sus adversarios independientes? Aunque no quiera admitirlo su matrimonio con el ex Presidente Felipe Calderón tiene mucho que ver; su poder dentro de la política mexicana, los organismos conservadores y el sector privado que vive de este aspecto se mantiene vigente aún a seis años de haber dejado el cargo; es obvio que los intereses de la pareja son más allá de un regreso a Los Pinos; sin el PAN o sus alianzas en sus espaldas pidiendo "hueso" su enriquecimiento tangible e intangible puede ir más lejos.

Por supuestos los ciudadanos son los más perjudicados pues no han escuchado proyectos de nación concretos además de que no han sabido como lidiar con la guerra sucia entre los candidatos quienes solamente usan al pueblo para su proselitismo individualista y partidista más que nacionalista olvidando muchas de las cuestiones que conciernen a la sociedad, seguridad, educación, infraestructura, corrupción, energía, ciencia y tecnología, relaciones internacionales (sobretodo con Estados Unidos y como sobrellevar a Donald Trump) y varios temas complejos que no tengan que ver con sus ya engrandecidos egos.